En un artículo previo (Takahashi, 2017) se propuso definir como Fenómeno El Niño (FEN) a aquellos eventos climáticos que calientan nuestra costa y generan lluvias intensas. Asimismo, se propuso clasificar a los FEN en dos tipos: “global” (por ej. 1982-1983 y 1997-1998) y “costero” (por ej. 1925, 2017). El tipo global es relativamente bien conocido, ya que corresponde a la fase cálida de El Niño Oscilación Sur (ENOS), un fenómeno océano-atmósfera que tiene lugar en todo el Pacífico tropical, aunque existen mecanismos físicos que lo pueden hacer particularmente intensos en el Pacífico oriental (Takahashi y Dewitte, 2016; Takahashi et al., 2017). En este artículo se presentará una breve síntesis de los resultados más recientes que brindan nuevas luces sobre este tipo de fenómeno.